Disculpas y un poquito más

Hola de nuevo a todos, en primer lugar quiero pediros infinitos perdones por haber pasado tanto tiempo sin publicar. La verdad es que tanto Annie como yo nos despistamos un poco con todo esto del nuevo curso y bla bla bla (excusas). Pero vamos a esforzarnos por volver a llevar esto al día y seguir publicando aquí un trocito de nosotras. A los que han seguido aquí durante todo este tiempo de silencio: gracias; y a los que acaban de llegar: bienvenidos y gracias también :)

Después de este discurso digno del rey, os hago un resumen de mi vida estos meses:

Empecé como ya sabéis el último curso de ESO y la verdad es que me ha ido mejor de lo que esperaba, estoy con mi mejor amiga en casi todas las clases, me siento a gusto con la mayoría de la gente de mi clase y las notas han ido bastante bien. 

También creo notar que mi autoestima va mejorando poquito a poco (definitivamente está mucho mejor que en los primeros años de secundaria). Cada día voy conociéndome un poquito más a mi misma y dándome cuenta de lo que quiero. Lo que digan los demás me esta empezando a dar más bien igual. Vivo para complacerme a mí, no a ellos. Y hace un tiempo esto era algo impensable para mí.

Estas vacaciones me he centrado en mí y en lo que más me gusta: las palabras. Más y más palabras todos los días y por todos los lados. Me he dedicado a leer todo lo que no pude durante las clases por los malditos exámenes. Y también he avanzado un poco con mi novela (bueno, solo llevo el primer capítulo, pero algo es algo ¬¬).

También he pensado en cambiar de look... Bueno, ya veré lo que se puede hacer xD.

De momento, y para agradecerlos a todos los que seguís allí que lo hayáis hecho, os dejo unos fragmentos del borrador que he hecho de mi primer capítulo.

Un olor a quemado se cuela entre mis sábanas y termina de despertarme. Me doy media vuelta y echo a un lado mi cajita de música para poder ver la hora en el despertador. Son casi las seis de la tarde, eso significa que he dormido como un tronco unas tres horas. Debí haber vuelto antes a casa anoche.

Me levanto de la cama y me dirijo al baño a lavarme la cara. Noto como se me eriza la piel por el contacto de mis pies descalzos con el frío suelo. La sensación me resulta agradable. Miro mi reflejo en el espejo del baño mientras me seco la cara con una toalla. Unas leves ojeras se han instalado bajo mis ojos verdes y parece que no tienen la intención de desaparecer pronto. Aunque si soy sincera creo que mis carreras nocturnas no ayudan demasiado. Dejo la toalla encima del lavamanos y me llevo las manos a la maraña negra y ondulada que tengo por pelo intentando adecentarlo un poco. Me topo con algunos nudos y tras insistir un poco logro deshacerlos.

***

Voy otra vez a donde están las cajas restantes. En todas ellas hay escrita la misma palabra: «desván». Me quedo observándolas con la mirada perdida, y no es porque me dé pereza tener que subirlas todas. Son las cosas de mi padre. Cuando murió, hace unos seis años, mamá guardó todo lo que le recordaba a él. Toda una vida. Guardada y cogiendo polvo sobre nosotros.

***

No me queda otra que sufrir en silencio, porque de lo contrario ya sé cómo acabaría esto. Me mandaría a terapia otra vez y yo me volvería loca porque me estarían reabriendo la herida cada dos por tres, lo que también volvería loca a mi madre y acabaríamos por tirarnos los trastos a la cabeza a diario. Lo que afectaría a Logan. Y eso es lo último que quiero. Porque él tuvo suerte, tenía apenas dos años cuando papá murió y casi no se acuerda de nada. Pero mamá y yo somos lo único que tiene, si eso se rompe… No. No puedo permitir que eso ocurra.

Y eso es todo, seguramente el capítulo del que he sacado estos fragmentos no sea exactamente igual cuando finalice el libro (anda que no queda xD) pero de momento estoy bastante satisfecha con lo que tengo.

~Candy